
Más de medio centenar de técnicos y responsables de la gestión de los residuos radiactivos generados en el ámbito hospitalario, industrial y de investigación de toda España, se reúnen hoy y mañana en Córdoba, en las XXI Jornadas de Residuos Radiactivos de Instalaciones Radiactivas que organiza Enresa. El objetivo de estas jornadas es intercambiar información y experiencias para optimizar los procesos de gestión de los residuos radiactivos que se generan en sus actividades que tienen una gran importancia en la vida cotidiana. Según ha destacado en rueda de prensa el presidente de Enresa, José Luis Navarro, los "pequeños productores", como se conoce coloquialmente a estas instalaciones radiactivas, son "el ejemplo más claro de cercanía a la sociedad en el cumplimiento del servicio público esencial que Enresa tiene encomendado".
En opinión de Navarro, se suele asociar a Enresa únicamente con el desmantelamiento de las centrales nucleares y los residuos que éstas generan. Pero hay más residuos radiactivos que gestionar. En España funcionan más de un millar de instalaciones radiactivas, de las que nos beneficiamos todos, en los campos de la investigación, la medicina y la industria, que en su actividad diaria trabajan con fuentes e isótopos radiactivos y generan residuos.
A lo largo del día de hoy se han presentado, en el hotel Eurostar Conquistador de Córdoba, distintas ponencias en las que se han analizado diferentes aspectos relacionados con la gestión de estos residuos, desde la perspectiva tanto del gestor como del productor. Las jornadas finalizarán mañana con una visita al Centro de Almacenamiento de El Cabril, para conocer in situ cómo se gestionan los residuos radiactivos de muy baja, y de baja y media actividad. El Cabril "es la pieza clave en la gestión de los residuos radiactivos en España", ha afirmado Navarro, adaptándose "como siempre lo ha hecho" a las necesidades de nuestra sociedad y permitiendo que estas aplicaciones "puedan seguir aportando sus avances de forma segura".
En la actualidad, ha explicado Navarro, Enresa mantiene contrato para la retirada de sus residuos radiactivos con 967 instalaciones radiactivas de las que el 52% pertenece a diferentes ámbitos industriales, algo más del 30% son de uso médico y cerca del 18% por ciento al campo de la investigación y la docencia.
Anualmente estas instalaciones generan, según la media de los últimos diez años, unos 15 metros cúbicos de residuos radiactivos, que son gestionados, de acuerdo con sus características radiológicas, por profesionales cualificados. Se trata de residuos heterogéneos que incluyen, entre otros, fuentes de radioterapia, materiales residuales del uso de radioisótopos en medicina nuclear y de todo tipo de investigaciones médicas o docentes; fuentes de control de procesos y medidas industriales; o equipos en cuya composición o que para su funcionamiento precisan de componentes radiactivos. En todo caso, son residuos de baja y media actividad que siguen un proceso reglamentado hasta que finalmente son gestionados en el Centro de Almacenamiento de residuos radiactivos de El Cabril.
El jefe del Departamento de Logística de Enresa, Victor Álvarez, ha detallado durante la rueda de prensa los contratos activos que tiene Enresa, destacando los que se encuentran en Andalucía. Según los datos de las recogidas de residuos realizadas en los dos últimos años, generó alrededor del 3,4 % de los residuos procedentes de instalaciones radiactivas retirados en toda España. Por procedencia, el 51% de los residuos retirados de Andalucía son de instalaciones industriales, más de un 46% de actividades de investigación y docencia, y cerca de un 4% de instalaciones médicas.
Casi la mitad de estos residuos radiactivos retirados en Andalucía proceden de Instalaciones incluidas en el ámbito del Protocolo sobre Vigilancia Radiológica de Materiales Metálicos, que tiene como objetivo detectar fuentes y materiales radiactivos entre los materiales metálicos a procesar antes de que se produzca un incidente.