Sistema de financiación
Enresa, además de desarrollar los aspectos técnicos propios de la gestión de residuos radiactivos, gestiona y administra los recursos económicos que se van obteniendo para la financiación de los cometidos para los que fue constituida.
Con objeto de preservar a las generaciones venideras de los importantes costes de la gestión de los residuos radiactivos y el desmantelamiento de las instalaciones nucleares, está instaurado un sistema específico de financiación de los costes de la gestión de estos residuos radiactivos independiente de los Presupuestos Generales del Estado.
Tras la aprobación de la modificación de la Disposición Adicional Sexta de la Ley 54/1997, del Sector Eléctrico, a través de la promulgación de la Ley 11/2009, de 26 de octubre, por la que se regulan las Sociedades Anónimas Cotizadas de Inversión en el Mercado Inmobiliario, se establecen cuatro prestaciones patrimoniales de carácter público no tributario (PPCPNT):
La primera prestación está destinada a cubrir la financiación de los costes correspondientes a la gestión de los residuos radiactivos y del combustible gastado generados en las centrales nucleares cuya explotación haya cesado definitivamente con anterioridad al 1 de enero de 2010, así como a su desmantelamiento y clausura, aquellos costes futuros correspondientes a las centrales nucleares o fábricas de elementos combustibles que, tras haber cesado definitivamente su explotación, no se hubiesen previsto durante dicha explotación, y el déficit de financiación que existiese en el caso que se produzca un cese de explotación anticipado respecto al periodo establecido en el Plan General de Residuos Radiactivos por causa ajena a la voluntad del titular. En el caso de que dicho cese se produzca por voluntad del titular, éste deberá satisfacer la prestación correspondiente.
Para la cobertura de los costes que se generan en la gestión de los residuos radiactivos procedentes de las centrales nucleares y de su desmantelamiento se crea una prestación sobre el kilovatio hora nuclear generado.
Los costes que se generan en la gestión de los residuos radiactivos procedentes de la fabricación de elementos combustibles, como en el caso de la fábrica de elementos combustibles de Juzbado en Salamanca, son financiados mediante la liquidación de otra prestación sobre cada elemento combustible fabricado.
Los costes que se generan cuando Enresa gestiona los residuos radiactivos procedentes de otras instalaciones, como hospitales o laboratorios, son cubiertos mediante la liquidación de otra prestación que autoliquidan los propios productores en el momento de la recogida de residuos.
Todas estas prestaciones pueden ser revisadas anualmente, mediante Real Decreto, con una memoria económica-financiera actualizada del coste de las actividades correspondientes, contempladas en el Plan General de Residuos Radiactivos.
Fondo para la financiación de las actividades del Plan General de Residuos Radiactivos
Con este modelo de financiación se produce un importante desfase temporal entre la captación de los recursos y su aplicación definitiva. Por este motivo, por la diferencia entre los ingresos y los gastos de Enresa, se constituye el “Fondo para la financiación de las actividades del Plan General de Residuos Radiactivos”.
El Fondo, a su vez, se nutre también de los rendimientos financieros obtenidos de la gestión de las inversiones financieras transitorias en las que se materializa fundamentalmente el mismo.
La composición del Fondo se materializa mayoritariamente en una cartera de inversiones financieras de carácter transitorio. Sobre esta cartera y sobre los rendimientos que de ella se obtengan, recae la responsabilidad de costear la gestión de los residuos radiactivos.
Conforme a lo establecido en el Real Decreto 102/2014, de 21 de febrero, para la gestión responsable y segura del combustible nuclear gastado y los residuos radiactivos, la gestión de los activos financieros en que podrá materializarse el Fondo debe garantizar la absoluta seguridad, una adecuada rentabilidad y la suficiente disponibilidad.
En consecuencia, los principios rectores de la estrategia de gestión de las inversiones financieras del Fondo son los siguientes:
Seguridad
La protección al riesgo de crédito, intermediación, depositaría y custodia a través de la rigurosa selección de las entidades tomadoras de recursos y de las entidades operadoras en los mercados financieros.
Rentabilidad
El objetivo de rentabilidad se establece en el modelo de financiación de la gestión de los residuos radiactivos que está definido en los sucesivos Planes Generales de Residuos Radiactivos.
Liquidez
El modelo de financiación define una clara vocación de gestión a muy largo plazo, tratando de conciliar las exigencias de liquidez del modelo con las condiciones de los mercados financieros en cada momento.
El marco regulatorio vigente antes citado establece un órgano colegiado externo, el Comité de Seguimiento y Control, para la supervisión, control y calificación de las inversiones transitorias relativas a la gestión financiera del Fondo. Es un órgano interministerial presidido por el secretario de Estado de Energía, y del que son también miembros el interventor General de la Administración del Estado, el subsecretario de Economía y Competitividad, la secretaria General del Tesoro y Política Financiera, la directora General de Política Energética y Minas y el subdirector General de Energía Nuclear. Periódicamente se reúnen para controlar la aplicación de los tres principios rectores de la gestión y establecer los criterios de inversión de la cartera.
Asimismo, y por considerar la gestión financiera del Fondo de indudable trascendencia dentro del modelo de gestión de los residuos radiactivos, el Manual de Organización de Enresa contempla un órgano colegiado interno, el Comité de Inversiones, cuya labor principal es analizar y definir la política de gestión financiera de la Cartera de Inversiones Financieras Transitorias.
Además, Enresa cuenta con las auditorías habituales de cualquier compañía en cumplimiento de la normativa legal y contable vigente, siendo revisados anualmente sus estados financieros por auditores externos.